jueves, 28 de julio de 2022

Los Indy y el CMLL.

Durante el mes de agosto se llevarán a cabo un par de eventos organizados por nano empresas  (Lucha Memes & Big Lucha/Cymet) en las sedes de PROMECOR, eventos en donde el talento de estas alternara con representantes del CMLL. El solo anuncio de ambas funciones ha desatado todo tipo de comentarios y especulaciones.

En primer lugar, vale la pena resaltar que, contrario a la creencia popular, no es inusual que el elenco del CMLL alterne con el de este tipo de empresas, de hecho, esto ocurre regularmente pero no bajo el sugestivo y un tanto vende humo título de “alianzas” que se ha vuelto de uso corriente en los últimos años sino bajo la menos atractiva venta de fechas y programas para promotores de toda la república. Sucede que tal parece que el concepto de “independiente” que tienen la mayoría de aficionados se reduce a un puñado de empresas y de luchadores y que por ello no tienen en cuenta la regularidad con la que se dan este tipo de eventos. 
 
En segundo término, cabe resaltar que la organización y cancelación de este tipo de eventos dependen exclusivamente de motivos comerciales. Más allá de las explicaciones y teorías morbosas que pululan en redes sociales lo cierto es que todo se reduce a conveniencia económica y al cumplimiento o incumplimiento de objetivos y requisitos para su organización. Si hay acuerdos económicos, buenos resultados financieros e irrestricto respeto a lo convenido, entonces habrá eventos y continuidad en el trabajo, de lo contrario, adiós. Así de simple.

Ahora bien, dando por sentado que para todos los involucrados la prioridad es obtener un beneficio económico lo cierto es que también debiera de haber margen para un beneficio en el rubro del espectáculo e imagen de todos. De tal modo que la pregunta que debe de hacerse es la siguiente; ¿De verdad existe un beneficio mutuo en ambos rubros? Mi primera respuesta seria decir que no.
 
No lo hay porque comprensiblemente este tipo de carteles están planteados en beneficio de quienes juegan de locales administrativamente hablando. En efecto, las sedes son colíseinas pero no la organización, de modo tal que la idea de los mismos es probar que su elenco está a la par o incluso por encima del de PROMECOR (lo cual desde el punto de vista del empresario que juega de local es irreprochable)
 
Es desde el punto de vista de la narrativa independiente en donde funciona la idea de que Aeroboy está al nivel del Negro Casas y del Último Guerrero o que Tonalli lo está de Templario o Carito de Dulce Gardenia. Bajo esta óptica no veo beneficio deportivo/mediático alguno para el CMLL pues para verlo tendría que creer que Atlantis Jr. necesita del Trauma II para legitimarse cuando la necesidad es al revés. El heredero del Negro Navarro es quien necesita del de Atlantis para reafirmar una imagen de “calador” que realmente no tiene.
 
Ahora cabe preguntarse, ¿Es posible que se pueda dar este beneficio deportivo y mediático para el CMLL? Creo que sí pero solo bajo circunstancias muy específicas. De entrada, reafirmo lo fácil que es para los independientes beneficiarse de una sociedad con el CMLL pues si pensamos en un evento organizado exclusivamente bajo su logo y en sus sedes, aquellos se benefician de inmediato –lo cual no sucede cuando el elenco colíseino juega de visitante en su propia casa-. 
 
¿Cómo lograrlo entonces? Para mí esto solo sería posible con la organización de un evento en donde las equivalencias estuvieran perfectamente establecidas. Los colíseinos de la zona media/alta y estelares reservados exclusivamente para los embajadores de empresas de reconocido prestigio y los de la zona media/baja y preliminaristas para los representantes de las empresas como las que dan pie a la redacción del presente texto. Un evento pensado como una fiesta para los preliminaristas colíseinos en donde, bajo la lógica del local expuesta líneas atrás, quedara claro que estos están al mismo o mayor nivel que los luchadores de dichas empresas independientes, ¿Aceptarían? Lo dudo. ¿Lo plantearía el CMLL? Lo dudo aún más.

Luego entonces no creo que las cosas cambien radicalmente, sin embargo, si esperaría que el discurso rancio que al día de hoy siguen utilizando las vacas sagradas independientes finalmente sea sustituido por uno de respeto recíproco en voz de los más jóvenes. En mi opinión, creo que la gente joven debería de tener la capacidad para publicitar sus luchas sin tener que caer en las descalificaciones gratuitas o en la auto conmiseración que caracteriza a los independientes de mayor fama. Si hay cambios en este rubro definitivamente sería un gran avance y solo por ello valdrían la pena este tipo de ejercicios.
 
Es por lo anterior que de momento única y exclusivamente veo un beneficio económico para PROMECOR –nada despreciable- pero no uno mediático y deportivo. Para que esto último se diera se necesitarían de una serie de condiciones que no se han dado en años de relaciones con empresas de nivel similar a las hoy enunciadas. Pero por algo se empieza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.