Al tiempo de la redacción del presente escrito ha pasado 1 año, 8 meses y 21 días desde la muerte de Paco Alonso, hecho que dio pie a la restructuración del organigrama de PROMECOR y a un sinnúmero de especulaciones y rumores infundados alrededor de su nueva mesa directiva. El veredicto de “Juan Pueblo” sobre dicha directiva es inapelable: “Son unos incompetentes, un montón de personas que no saben de lucha libre, que nadie conocía y que mediante un golpe de estado (sic), despojaron a Sofía Alonso de su empresa (sic) porque aborrecen a la modernidad y a las mujeres. Están acabando con la lucha libre”.
En esta ocasión no me concentraré en poner en ridículo a quienes no tienen ni la menor idea de la ley de sociedades mercantiles y que no saben distinguir entre marcas comerciales y razones sociales. De tal forma que me enfocaré en la gestión post-Alonso a efecto de poner sobre la mesa algunos datos y dejar al aire varias interrogantes. La transición y todos los efectos legales que de ella derivan en realidad se concretaron alrededor de tres meses después de la muerte de Paco Alonso, es decir que en realidad ha pasado 1 año, 5 meses y 21 días del inicio formal de dicha gestión. Al respecto cabe mencionar que la primera decisión que se tomó fue respetar el plan de trabajo previamente diseñado, en efecto señores, aunque no lo parezca y por cuestiones de logística una función lleva varias semanas -incluso meses- de planeación. Por ejemplo, el concepto, el diseño, la elaboración y la agenda del campeonato universal femenil no toma un par de días, sino semanas -meses-.
El 2020 inició, ahora sí, teniendo en mente a varias de las ideas de la nueva administración siendo la principal de ellas la de organizar un magno evento por mes. Desafortunadamente, la pandemia del coronavirus obligó al cierre de actividades de tal forma que, en realidad, la nueva administración únicamente ha podido laborar alrededor de 5 meses y 7 días con sus arenas abiertas porque estas llevan más de un año cerradas, además, durante cuatro meses y medio no pudieron organizar ni una sola función. ¿Qué se puede evaluar en tales circunstancias? Mucho y la mayoría es positivo.
De inicio, el primer trimestre del 2020 contó con un mayor nivel de asistentes que el visto en años anteriores durante el mismo periodo. En segundo lugar, la directiva que encabeza actualmente Chava Lutteroth ha hecho del CMLL la empresa de lucha libre que más se ha ajustado a las medidas sanitarias impuestas por el gobierno y la que mayor responsabilidad social ha mostrado durante la pandemia. Ahora bien, aquí empiezan las preguntas: En un escenario tan poco favorable y con tan poca recaudación, ¿Cómo es posible que un hombre que nadie conoce, un supuesto dictador intolerante, haya podido emplear -hasta ahora- a 125 de 130 luchadores que empleó durante el 2019?, ¿Cómo es posible que ante una oferta laboral tan paupérrima y estando en manos de un “ignorante” del medio no se haya generado una desbandada de luchadores?. ¿No valdría la pena empezar a cuestionarse varios ideas difundidas durante todos estos meses?
El CMLL logró la reapertura en la CDMX y presentar la primera función tras la veda. Obligado por las circunstancias, cierto, pero entre muchas otras opciones que tenían eligieron comercializar su señal a través de Ticketmaster Live!, someter a votación las luchas de su aniversario y aún ante la difícil situación, decidieron modificar luchas y funciones a raíz de los casos positivos de COVID detectados en la empresa a pesar de la crisis mediática que hacerlo conlleva ¿El día de hoy todavía hay alguien que crea que el CMLL no quería tener a Bandido y Volador en su aniversario? En un periodo turbulento me parece que es justo reconocer a la gestión y el liderazgo de Chava Lutteroth quien ha podido mantener y ganar la confianza de prácticamente la totalidad de su elenco a pesar de ser “un desconocido que ignora la materia”.
¿En donde está la supuesta misoginia cuando hay mujeres entre los directivos?, ¿En dónde está la misoginia cuándo la mayoría de la propiedad intelectual que emplea PROMECOR está en manos de una mujer?. Finalmente, en un entorno de incertidumbre y de golpes bajos que buscaron desestabilizar la relación entre NJPW y el CMLL, Chava Lutteroth logró refrendar la alianza con la empresa líder en Japón. ¿Naoki Sugabayashi es tan ignorante que a diferencia de los expertos de sofá no puede darse cuenta de que Lutteroth no sabe nada del negocio y por eso decide hacer negocios con él?, ¿No acaba de arrancar el CMLL sus funciones en vivo con el mejor evento en lo que va del 2021?, ¿Los conspiranoicos cuando van a empezar a cuestionar las ideas que, sin fundamento, han comprado a lo largo de todo este tiempo? Vaya soberbia la de algunos que creen que le pueden enseñar de chiles a La Costeña. A los Lutteroth les ha tocado lidiar con un entorno completamente desfavorable y más allá de errores en su propuesta de lucha que he señalado puntualmente en mis reseñas en “la Catedral de la Lucha Libre”, considero que su trabajo administrativamente hablando es bueno y que su liderazgo es notable.
Cuatro meses y quince días sin poder abrir la arena y solo cinco con público en las gradas. Y sin embargo, se mueve.
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